El Bar de la Media Luna [Libre]

Note la presión de su mano y me pegué totalmente a él, notando el calor de su cuerpo junto al mío. Sin poderlo evitar empecé a besarlo con algo más de ansias, saboreando sus labios con frenesí sin querer apartarlos nunca de los míos.

Me recosté suavemente contra el sofá y lo recosté sobre mi, correspondiendo al beso, mordiendo con algo de fuerza sus labios y dejando que mis manos ascendieran por su espalda, acariciandola sobre la tela

Me dejé recostar y noté sus manos en mi espalda, tensandome un poco... los nervios me estaban jugando una mala pasada.

Reí contra sus labios al sentir como e tensaba su cuerpo, besando estos con suavidad y pequeños besos cortos.

-Te van a regañar si te ven tus jefes...- comenté al pensar que no era muy normal lo que estábamos haciendo siendo un par de desconocidos

Entreabrí los ojos y le miré.

- No pasa nada... hoy no están... pero si quieres.. me voy...

Negé con suavidad.

-Pensé que... quizá esto era algun tipo de atención que ofrecíais a los clientes y que me dirías que no pasaba nada por eso- comenté ladeando la cabeza

Ya cansado de estar alli sin acer nada , pague al cantinero y me fui

- ¿Q-Qué crees que soy...? - le miré apartándome un poco.

Enarqué las cejas cuando noté cierto tono de ofensa en su voz.

-No he dicho que lo seas, es lo que intentaba averiguar...- comenté mientras lo miraba

Suspiré y me levanté.

- Discúlpame...

Cogí el vaso de whisky y me lo terminé, cogiendo la bandeja.

Alcé las cejas al verlo levantarse, ya la había vuelto a cagar...

-Oye...- dije cuando aún lo tenía cerca -No he dicho que seas nada ni insinuado que fueras nada... era una posibilidad, y ya... solo preguntaba- murmuré mirándolo

-Si... mejor vayamos fuera y cuando llegue la grua te llevo a casa-dijo recogiendo sus pertenencias y dirigendose hacia la salida a esperar a Reita. No le apetecia estar más rato ahí... el ambiente empezaba a cargarse...

- Tus palabras no me parecieron una insinuación... -le miré, algo dolido.- si me he dejado llevar es porque me atraes, hay algo en ti que me gusta... no porque sea... eso... a mi nunca nadie me ha tocado.

Lo miré con una mueca de resignación. si, la había cagado...

-No era mi intención molestarte... era solo una pegunta, no estaba insinuando nada, de verdad- comenté in apartar mi mirada de el, pidiéndole perdón con ella

Finalmente me incorporé un poco y agarré su brazo, tirándo de el para acercarlo, quitándole la bandeja y el vaso y dejándolos en la mesa, volviendo a tirar hasta que cayó sobre mi y sin darle tiempo volviendo a atrapar sus labios entre los míos.

Vi como se levantaba y agarra firmemente mi brazo, tirando de él para acercarme. Me quedé mirándole a los ojos mientras me quitaba la bandeja y el vaso sin darme cuenta. Sin dejarme decir nada atrapo mis labios entre los suyos, y le miré, cerrando poco a poco los ojos, correspondiéndole.

No quería joderla, no quería que se marchara de mi lado, no quería...

Lo besé con suavidad mientras posaba mis manos en sus suaves mejillas, acariciándolas con mi pulgares.

-Siento lo que he dicho...- murmuré entre sus labio

- No te disculpes... besame por favor... -susurré.

Sonreía al escucharlo y llevé una de mis manos a su nuca, presionándola con suavidad mientras enredaba los dedos en su pelo, volviendo a besarlo, esta vez con cierto toque de necesidad.

Atrapé sus labios con los míos besándole con algo de ansia. Notaba cada vez más como necesitaba esos labios... como lo necesitaba... ¿a él?

Sentía mi corazón latir acelerado cuando lo tenía cerca, y no sabía porque, no lo conocía de nada... Lo que estaba claro era que lo quería cerca, muy cerca de mi...

Hice algo más de presión en su nuca mientras mis dedos jugueteaban con su pelo, pasando la otra man o por su cintura mientras exploraba su boca suavemente con la lengua.

Noté como alguien me tiraba algo a la cabeza, un papel o algo, y alcé la vista, separando mis labios de los Tsu, giré la cara y me quedé pálido.

Sentí como separaba sus labios de los míos y lo miré, viendo como se giraba y al hacerlo palidecía, alzándo las cenas y siguiendo la dirección de sus ojos

Maldita sea, mi jefe... ¡¿Pero no venía mañana?! ¿Por qué tenía que interrumpir justo ahora? Me levanté lo más deprisa que pude y cogí la bandeja y ambos vasos, corriendo hacía la barra.

Alcé las cejas al ver como se levantaba a toda prisa, mirándo al tipo que teníamos en frente... algo me dijo que era su jefe... Le sostube la mirada, esperando no haberle causado problemas a Miku...

Cuando estaba en la barra y con la respiración algo agitada, miré a Tsukasa esbozando una sonrisa.